El gobierno de Kazajistán ha anunciado que demolerá mezquitas construidas por ciudadanos sin autorización oficial, a pesar de la complejidad de las medidas administrativas para obtener el permiso.
Esta decisión hizo mucho ruido, ya que en los últimos 13 años se otorgaron solo 8 permisos, con gran dificultad.
Con la decisión del gobierno, muchas salas de oración e escuelas coránicas autogestionadas se verán obligados a cerrar.
Las autoridades también han impuesto la demolición de todas las mezquitas y salas de oración de más de 300 metros cuadrados construidos dentro de escuelas y universidades.